"Un hombre, que regularmente asistía a las reuniones de un determinado grupo, sin ningún aviso dejó de participar en sus actividades.
Después de algunas semanas, una noche muy fría el líder de aquel grupo decidió visitarlo. Encontró al hombre en casa, solo, sentado frente a una chimenea donde ardía un fuego brillante y acogedor. Adivinando la razón de la visita, el hombre dio la bienvenida al líder, lo condujo a una silla grande cerca de la chimenea y se quedó quieto, esperando una pregunta. Se hizo un grave silencio. Los dos hombres sólo contemplaban la danza de las llamas en torno de los troncos de leña que crepitaban.
Al cabo de algunos minutos el líder, sin decir palabra, examinó las brasas que se formaban y cuidadosamente seleccionó una de ellas, la más incandescente de todas, retirándola a un lado del brasero con unas tenazas. Volvió entonces a sentarse, permaneciendo silencioso e inmóvil después de solicitar permiso para fumarse una pipa.
El anfitrión prestaba atención a todo, fascinado pero inquieto. Al poco rato, la llama de la brasa solitaria disminuyó, hasta que sólo hubo un brillo momentáneo y el fuego se apagó repentinamente. En poco tiempo, lo que era una muestra de luz y de calor, no era más que un negro, frío y muerto pedazo de carbón recubierto por una leve capa de ceniza..." 1
¿Tú también has perdido tu brillo? ¿Después de aquella crisis, ya no eres lo que eras antes? ¿Sientes que tu vida ha perdido su color y su vivacidad, y no sabes cómo recuperarlos?
Continúa aquí para aprender a amarte de nuevo y a creer otra vez en ti.
Después de algunas semanas, una noche muy fría el líder de aquel grupo decidió visitarlo. Encontró al hombre en casa, solo, sentado frente a una chimenea donde ardía un fuego brillante y acogedor. Adivinando la razón de la visita, el hombre dio la bienvenida al líder, lo condujo a una silla grande cerca de la chimenea y se quedó quieto, esperando una pregunta. Se hizo un grave silencio. Los dos hombres sólo contemplaban la danza de las llamas en torno de los troncos de leña que crepitaban.
Al cabo de algunos minutos el líder, sin decir palabra, examinó las brasas que se formaban y cuidadosamente seleccionó una de ellas, la más incandescente de todas, retirándola a un lado del brasero con unas tenazas. Volvió entonces a sentarse, permaneciendo silencioso e inmóvil después de solicitar permiso para fumarse una pipa.
El anfitrión prestaba atención a todo, fascinado pero inquieto. Al poco rato, la llama de la brasa solitaria disminuyó, hasta que sólo hubo un brillo momentáneo y el fuego se apagó repentinamente. En poco tiempo, lo que era una muestra de luz y de calor, no era más que un negro, frío y muerto pedazo de carbón recubierto por una leve capa de ceniza..." 1
¿Tú también has perdido tu brillo? ¿Después de aquella crisis, ya no eres lo que eras antes? ¿Sientes que tu vida ha perdido su color y su vivacidad, y no sabes cómo recuperarlos?
Continúa aquí para aprender a amarte de nuevo y a creer otra vez en ti.
6 Pasos para recuperar la confianza en ti y volver a amarte como tu persona favorita
1. No pienses que la crisis es algo insuperable
Una crisis es cualquier cambio repentino e inesperado que altera significativamente el funcionamiento o curso normal de tu vida. En este caso, nos referimos especialmente a crisis sentimentales provocadas por la ruptura de una relación que significaba mucho para ti o por el daño que te dejó tu última relación (al tratarse de una relación tóxica).
El primer paso para traer de vuelta tu amor propio y tu confianza es aceptar que los problemas y las adversidades siempre llegarán por más que tu intentes evitarlas.
No puedes cambiar el hecho de que ocurran muchas cosas difíciles, pero lo que si puedes controlar es la manera en que afrontas tales situaciones.
- Fija tu atención más alla del presente que ahora vives.
- No te concentres en lo ocurrido ni en el problema en si
- Ten presente que no eres la única persona a la que le ha ocurrido algo así
- Pon tu atención en el futuro que tienes delante de ti
- En lugar de asumirte como víctima, discierne cualquier lección que esto te haya dejado y apreciala
2. Acepta el cambio como parte ineludible de la vida
Para nadie es fácil dejar la zona de confort y comenzar a afrontar los cambios de la zona de aprendizaje. El miedo a lo desconocido permea gran número de decisiones y te detiene de arriesgarte a sufrir cambios.
Pero cuando entiendes que el cambio tarde o temprano llega, aunque se trate de algo doloroso, te podrás concentrar no en aquello que te es imposible controlar, sino en aquellas situaciones y circunstancias que son susceptibles a modificaciones según las elecciones que hagas.
- No te centres en las cosas que ya no puedes cambiar
- Dedica tu atención y tus energías a las circunstancias que puedes controlar y darles forma con tus decisiones
3. Actua con determinación y sin dilaciones
Poseemos la tendencia de creer que, ignorando los problemas o dejándolos para después éstos van a desaparecer.
Pero esto es muy perjudicial cuando quieres recuperar la confianza y el amor en ti. Sobre todo cuando la crisis que viviste tiene que ver con sentimientos.
- No seas indiferente a los cabos que falta por atar
- Espanta la duda de tu cabeza para que puedas actuar claramente y ser consciente de lo que debes y necesitas hacer
- Obra con determinación haciendo lo que sea necesario para cerrar las heridas que te haya dejado la crisis
4. Redescubrete
Sea cual sea la crisis que sufriste; una ruptura, una relación tóxica, la dolorosa pérdida de tu ser amado o que hayas olvidado amarte y cuidar de ti con el largo transcurso del tiempo en la monotonía de tu relación, la parte más importante de este proceso empieza cuando vuelves a ti para conocerte y descubrir el extraordinario ser humano que eres.
- Busca espacios en los que puedas dedicar toda tu atención a ti y a hacerte feliz, libre de distracciones e interrupciones.
- Lleva un cuaderno o agenda, a manera de diario, en el que consignes cada día una cualidad de ti que te haga sentir orgullosa(o) de ti misma(o) y escribe junto a esta, una anécdota en la que dicha cualidad te haya hecho sobresalir o te haya sido útil para hacer algo destacable.
- Dedica tiempo a 'consentirte' con aquellas cosas que te hagan feliz, pero que dejaste de hacer por el motivo que fuere. Escribe, dibuja, habla con viejas amistades, sal a meditar en un parque, comete un litro de helado tu sola(o). ¡Complácete como mejor te parezca!
5. Mantén una actitud positiva
Nada tiene el poder suficiente para dañarte o impedirte ser feliz como tú misma(o). Y la actitud con la que afrontes cada experiencia será determinante para recuperar la confianza en ti, porque te estarás demostrando que tienes la capacidad para sobreponerte a cualquier cosa con alegría y tranquilidad.
Las personas positivas son capaces de disfrutar su relación con otras personas de forma mas fácil, disfrutan más su trabajo, se divierten más con las cosas simples y corrientes del día a día, son más valientes y luchadoras, entre otras cosas.
Para mantener una actitud positiva y realista:
- Visualiza las cosas que quieres
- Deja de preocuparte por las cosas que no tienes
- Deja a un lado los miedos (infundados) que te limitan
- Asume la responsabilidad de lo que sientes, piensas y haces
6. Cuídate
Así de simple. Piensa que eres un bebé que precisa todo el tiempo de los cuidados de su madre. Ahora, concedete todas esas atenciones y todos esos cuidados a ti mismo, porque tú eres la persona más importante en tu vida.
Te servirá mucho leer también: Aprovecha tu soltería para hacer estas magníficas cosas
¿Qué otras herramientas puedes sugerir para que otros logren amarse y creer en si mismos tras una crisis? Deja tus respuestas en los comentarios, por favor.
Referencias
1. La culpa es de la vaca Parte 2; Pág. 20.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Deja aquí tus comentarios....