Katy es una mujer dulce y laboriosa, muy dedicada a la realización de los quehaceres. Fred, por su parte, es un tipo amable y trabajador, muy diligente para realizar eficazmente lo que se espera de él. Ellos llevan 3 años casados, pero las cosas no andan muy bien. Discuten con mucha frecuencia y cada uno prefiere pasar muy poco tiempo con el otro. Él se ha refugiado en la bebida; ella pasa la mayor parte del tiempo con sus amigas y regresa a su casa solo en la noche.
Por un lado, Fred afirma que Katy no lo quiere porque "prefiere estar con sus amigas", pero ella argumenta que solo busca compañía con sus amigas porque "él se la pasa bebiendo"...
Entonces, ¿quién tiene la razón?
Este mismo dilema es el que enfrentan muchas parejas en su relación; discuten ferozmente para demostrar que cada uno tiene la razón.
Aquí podrás aprender cuál es la forma más inteligente de manejar este tipo de discusiones en la cada uno asume tener la razón.
Si pretendes ganar en una discusión, demostrando que eres tú quien está en lo correcto, debes aprender algo: Si en una relación, ambos no ganan cuando se da una discusión, la realidad es que ambos están perdiendo. Puede que tú hayas conseguido imponer tu verdad, pero al hacerlo, habrás menospreciado el punto de vista de tu pareja, habrás descalificado y reprobado sus opiniones y, en última instancia, habrás herido sus sentimientos al demostrarle que sólo es válido y aceptable lo que tu digas, opines y sientes. Esto es egoísta.
Por un lado, Fred afirma que Katy no lo quiere porque "prefiere estar con sus amigas", pero ella argumenta que solo busca compañía con sus amigas porque "él se la pasa bebiendo"...
Entonces, ¿quién tiene la razón?
Este mismo dilema es el que enfrentan muchas parejas en su relación; discuten ferozmente para demostrar que cada uno tiene la razón.
Aquí podrás aprender cuál es la forma más inteligente de manejar este tipo de discusiones en la cada uno asume tener la razón.
Cómo manejar una discusión en la que ambos pretenden tener la razón y lograr que los dos salgan ganando
¿Por qué se dan este tipo de discusiones?
Esta forma de discutir en pareja se da cuando cada uno tiene un punto de vista respecto a una información, un dato, un hecho, una decisión o una acción en particular, que resulta ser diferente y/o opuesto al punto de vista del otro. Entonces se genera un desacuerdo entre los dos porque cada uno asume que tiene la verdad y que la opinión del otro es equivocada.
Cada uno ve la realidad desde su perspectiva, por lo tanto, es fácil que se presenten diferentes opiniones acerca de un mismo punto. Es aquí donde la falta de comprensión y la dificultad para comunicarse con asertividad da lugar a la discusión y, por extensión, a una pelea que puede tener proporciones inacabables, pues cada uno buscará ganar con su argumento mientras demuestra que el otro está en el error.
Cada uno ve la realidad desde su perspectiva, por lo tanto, es fácil que se presenten diferentes opiniones acerca de un mismo punto. Es aquí donde la falta de comprensión y la dificultad para comunicarse con asertividad da lugar a la discusión y, por extensión, a una pelea que puede tener proporciones inacabables, pues cada uno buscará ganar con su argumento mientras demuestra que el otro está en el error.
"Ya que no es posible evitar las diferencias, ¿Cómo manejarlas sabiamente para que ambos logremos ganar en una discusión?"
1. Ten paciencia
Cuando intentas demostrar a tu pareja que tú tienes la razón y ella hace lo mismo, es fácil enfandarse y, si no eres una persona paciente, perder el control. Esto de ninguna manera arregla la diferencia, por el contrario, hace que la situación se ponga más tensa y que tu pareja se ponga a la defensiva.
Por eso, lo primero que necesitas poner en práctica cuando surja una discusión es mantener la calma. Si es necesario, tómate un breve respiro y cuenta hasta 10 para tranquilizarte. De esta manera, podrás continuar la conversación de forma pacífica, enfocandote en la diferencia, en lugar de sentirte tentado(a) a atacar a tu pareja.
"La blanda respuesta quita la ira, mas la palabra áspera hace subir el furor"
Proverbios 15:1
2. El 'problema' es que hay problemas que no tienen solución
No me refiero a problemas comunes y simples como: quién debe hacer las compras, a que hora deben irse a dormir, que van a comer mañana, cuándo se tomarán unas vacaciones... Me refiero a aquellas cuestiones delicadas y trascendentales que tienen que ver con los valores, las creencias, la personalidad e individualidad y el carácter.
Cuando intentas imponer tu opinión o tu punto de vista por encima de tu pareja (en lo que se refiere a aquellos puntos trascendentales) estás tratando de cambiar la esencia de su persona. Y esto, sencillamente, no corresponde a la manera de actuar del amor verdadero.
¿Que se puede hacer en estos casos?
- Acepta las diferencias existentes entre tú y tu pareja y aprovecha esto como una forma de enriquecer la relación: Tú aprendes de ella/él y él/ella aprende de ti.
- Entiende que, cuando se trata de situaciones relativas a los valores, las creencias y/o la personalidad, lo más saludable es evitar imponer tu opinión, pues debes aceptar a tu pareja tal cual es.
- Comprende que existen diferencias que es mejor no intentar 'igualar', porque sencillamente no tienen solución (ejemplo: no intentes impedir que tu pareja vea a sus papás o que estudie lo que a ella le dicte su buen juicio)
3. "Si cambias la forma en que miras las cosas, las cosas que miras cambian" (Wayne Dyer)
Dicho de otro modo: Si quieres que tu pareja te de la razón, demuéstrale que tu entiendes, respetas y valoras su punto de vista.
Si solamente te dedicas a argumentar tu postura y a menospreciar el punto de vista de tu pareja, ésta, naturalmente, se sentirá atacada, ofendida, percibirá que tú te estás poniendo por encima de ella y le estarás indicando que se encuentra equivocada (lo cual no es agradable de reconocer para nadie).
Así que lo mejor que puedes hacer es mostrarle, no solo con tus palabras sino también con hechos, que tu amor es incondicional, que le aceptas tal cual es e indicarle que juntos, con diálogo y respeto, podrán llegar a un acuerdo ecuánime.
4. ¿Qué ganas al tener siempre la razón si poco a poco vas perdiendo a tu pareja?
Si pretendes ganar en una discusión, demostrando que eres tú quien está en lo correcto, debes aprender algo: Si en una relación, ambos no ganan cuando se da una discusión, la realidad es que ambos están perdiendo. Puede que tú hayas conseguido imponer tu verdad, pero al hacerlo, habrás menospreciado el punto de vista de tu pareja, habrás descalificado y reprobado sus opiniones y, en última instancia, habrás herido sus sentimientos al demostrarle que sólo es válido y aceptable lo que tu digas, opines y sientes. Esto es egoísta.
Con el paso del tiempo, tu pareja sentirá que su opinión no cuenta, que no tiene 'voz ni voto' en las decisiones importantes, que nada de lo que piense y diga tiene valor para ti; en consecuencia, ya no se sentirá feliz en vuestra relación, creará la duda de si vale la pena o no seguir contigo, hasta que, probablemente, decida alejarse de ti.
Dialogando se puede hallar armonía de las más contrarias diferencias
Concluyendo:
- Se más flexible para considerar y respetar el punto de vista de tu pareja
- Pon en práctica la escucha activa. A veces, cuando muestras sincera disposición a escuchar, tu pareja se sentirá muy bien pues notará que tu estás interesado(a) en sus opiniones y sentimientos.
- Aprende que las diferencias no deben ser cambiadas sino concertadas y aprovechadas para enriquecer la relación
- Sentarse a conversar con serenidad acerca del tema en desacuerdo es la mejor forma de reconciliar las diferencias y fortalecer el amor
Y tú ¿Me darás la razón acerca de lo que compartí contigo? ¿Cómo has manejado este dilema en tu relación? Cuéntame en los comentarios
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