Estas son las frases que jamás debes decir a tu pareja

"La muerte no es lo único que separa a los amantes. La ruptura en la comunicación también" (Dwight Small).
¿Quién no ha sufrido los efectos adversos de frases ofensivas y/o destructivas en medio de una discusión con su pareja? Seguramente no era tu intención ni la suya decir cosas que lastimaran, sin embargo, la efervescencia del momento (y en cierta medida, el desconocimiento) los condujo a expresar esas frases tóxicas que quebrantan la unidad.
Por eso, aquí te advierto en contra de esas frases severamente perjudiciales que nunca deberías decir a tu pareja si quieres mantener vivo el respeto y fuerte el amor.

Frases que no debes decir a tu pareja por ningún motivo

Mayoría de las siguientes frases se han vuelto tan comunes que quizá te resulte incoherente pensar que tienen algo de malo. Pero, el hecho de que a ti y a tu pareja les parezcan 'normales', no significa que no tengan una significativa carga negativa que es mejor evitar.

Después de conocerlas y saber por qué son tan dañinas, naturalmente iniciarás una 'autocampaña' en contra de las mismas y, con un poco de compromiso y esfuerzo, las erradicarás pronto de tu vocabulario.

1. "Lo que quieras está bien"

"Cariño, ¿Qué deseas comer?": "Lo que tú quieras, para mi está bien"

¿Qué hay de malo con esa forma de respuesta? Básicamente todo. Cuando le preguntas a tu pareja por algo, es obvio que esperas una opinión contundente y precisa que te permita tomar una decisión acertada e inteligente que agrade a ambos. Totalmente contrario es lo que transmite esa frase. Indica desinterés y que poco importa lo que pase o deje de pasar. Desde luego, esto afecta gradualmente la relación pues se va creando un muro invisible de distanciamiento que, principalmente, degrada la comunicación.

Una variante de aquella frase es "Como quieras", cuyo significado es técnicamente el mismo.

Para evitar recurrir a esta frase es bueno que recuerdes que una relación es cosa de dos, no de uno, y que las decisiones son más provechosas cuando se toman entre los dos.

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2. No quiero hablar ahora

Esta es para mi la peor y mas dañina de todas. Puede ser el producto de un disgusto, una herida o estar motivada por desinterés. Suele aparecer cuando uno de los dos intenta hablar acerca de un tema específico y el otro no, entonces, utiliza esa frase como una defensa que le evitará tratar ese molesto o incomodo asunto. El problema con la frase es que, generalmente, surge en medio de un conflicto e impide que el motivo de la discordia sea resuelto, por lo que pueden quedar heridas abiertas y cabos sueltos.

Ya sabes que uno de los consejos para lograr una comunicación efectiva con tu pareja es tratar los problemas al instante. Por eso, si se posponen o se evitan, crean resentimiento, frustración y más problemas.

3. Es tu culpa

"Es tu culpa que nos hayan cortado el servicio de agua. Olvidaste pagar la factura. Ahora, ¿qué vamos a hacer?" Tú tienes la culpa de todo..."

Es lo más contraproducente que se puede decir en una relación cuando se presentan los problemas. Las dificultades no se resuelven por encontrar un culpable. Echar la culpa al otro dificulta el proceso de encontrar soluciones al conflicto. Además, es una pesima forma de conducir una discusión, pues en lugar de atacar el desacuerdo, se ataca a la persona.
En lugar de atribuir culpas a tu pareja, asume tu parte de responsabilidad en la relación y aprovechen el tiempo para hallar soluciones.

4. Frases con "Nunca" o "Siempre"

"Nunca me ayudas con los oficios de la casa. Siempre tengo que hacerlo todo Yo"

"Tu siempre estás criticandome. Nunca valoras nada de lo que hago por ti"

Usualmente, cuando los términos en una discusión adquieren este tinte de absolutismo, equivale a menospreciar todas aquellas ocasiones en las que la pareja si hizo bien las cosas. Por ejemplo, Juan es un poco distraido y de vez en cuando olvidaba sacar la basura de la casa, por lo que Mary debía hacerlo. Sin embargo, son pocas las ocasiones en que Juan lo olvidó. Después de varias semanas de hacerlo sin falta, Juan amaneció con un horrible dolor de cabeza, por lo que salió para el trabajo olvidando sacar la basura. Ese mismo día Mary se levantó de mal humor, y al encontrar que su compañero no sacó la basura, se enojó más y estuvo así todo el día. Cuando Juan llego de trabajar, esperaba encontrar a su Esposa de buen humor, sin embargo fue recibido con las siguientes palabras: "Tu nunca tienes un poco de consideración conmigo. Esta mañana tuve que sacar la basura de nuevo. SIEMPRE LO OLVIDAS TODO..."
Con frases de este tipo, se comete otro grave error que afecta severamente la comunicación: En lugar de atacar el problema y discutir enfáticamente acerca de éste, se lanzan ataques en contra de la persona y se magnifican sus defectos (cosa que para nadie es agradable).
Enfocate en la necesidad, el problema, el desacuerdo y/o el conflicto que los haya puesto a discutir, en lugar de criticar y menospreciar a tu pareja.

5. "¿Desde cuando te gusta...?"

"¿Desde cuando te gusta dejarte crecer la barba?"

Es natural que con el transcurso del tiempo establezcas una zona de confort con tu pareja llena de todo lo conocido: Hábitos, horarios, costumbres, lugares, actividades, etc. Habituados a esa zona de comodidad, el que uno de los dos introduzca un cambio resulta extraño y, tal vez, sospechoso. Es ahí donde suele aparecer esa frase cargada de incertidumbre y desconfianza. A través de ella le indicas a tu pareja que te resulta dudoso su reciente cambio y que piensas que detras del mismo está ocultando algo cuestionable.
Para evitarla es importante que aceptes el cambio como parte natural de la vida de todo ser humano. En lugar de sospechar de tu pareja, busca con sinceridad descubrir a qué se debe dicho cambio; en la mayoría de los casos se trata de un interés genuino que nació por algo auténtico y seguro, por lo que deberías alentar y apoyar a tu pareja.

6. "Te lo dije"

¿Eres su amigo(a) o un(a) juez severo(a) e implacable que tiene cómo propósito resaltar hasta las nubes los fracasos de tu pareja? Entonces no utilices está frase en tu relación, sobre todo porque en los momentos en que se suele utilizar es cuando la otra persona ha resultado chasqueada por algo que no salió como esperaba. Desde luego, lo último que se quisiera en una situación así es a un(a) sabelotodo que reproche con voz acusadora la derrota sufrida.
En lugar de eso, muestrate comprensivo(a) con tu pareja, manifiestale tu completo apoyo y transmitele un ánimo ferviente para que sepa que, a pesar del revés sufrido, hay más caminos por recorrer.

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7. "Si realmente me quisieras..."

"Si en verdad me amaras, preferirías pasar el fin de semana conmigo en lugar de irte con tus amigos"

Cuando recurres a esta frase usada con la intención de manipular, puede que esté sucediendo alguna de estas cosas:

1.  Que padezcas de una inseguridad tal que te hace desconfiar de tu pareja todo el tiempo y dudes de él/ella constantemente.
2. Que tengas poca autoestima, por lo que a través de la manipulación buscas remediar el miedo que te da la autonomía de tu pareja.
3. Que dudas del amor de tu pareja, porque hace algunas cosas por si sola basándose en el derecho que posee naturalmente de ser libre.
4. Que, efectivamente, tu pareja ha descuidado algunas cosas contigo y crees que manipulando de esa forma te vas a salir con la tuya

De todos modos, nada debería llevarte a ejercer un tipo de presión como el que consigues mediante el uso de esa frase. Si quieres, sientes y temes algo, dilo a tu pareja con franqueza, abiertamente y sin enredos; verás que podrás obtener mejores resultados.

¿Qué frase has dicho o te ha dicho tu pareja que consideras muy negativa y dañina para una relación? Dejala en los comentarios.