No en todo caso, "las comparaciones son odiosas". De hecho, muchas elecciones suelen basarse en este método; como cuando examinas las diferencias entre dos televisores para decidirte por el mejor. También, cuando tratas de hacer amigos, por ejemplo, en el nuevo curso al que te inscribiste, intentas formar amistad con aquellos que, según tus juicios, son los más acordes a ti y a tu personalidad, dejando de lado a aquellos que no se ajustan a tus creencias y valores. En dicho caso ¿que te llevó a decidir así? Sencillo: La comparación que hiciste entre unos y otros.
No obstante, este mismo tema tiene un lado oscuro, y es cuando esas comparaciones actúan en tu contra y en contra de tu relación. Continúa leyendo este artículo para descubrirlo.
La cara negativa de las comparaciones
Cuando te comparas con otros, generalmente lo haces con personas llenas de cualidades sobresalientes, logros, posesiones, etc. Esta visión poco saludable te puede llevar a:
- Tener baja autoestima: Al fijarte en las cosas que otros poseen y que tú no, te sientes inferior y haces que se deteriore el concepto y la imagen que tienes de ti mismo. Te infravaloras al punto de sentirte inconforme contigo mismo y con tu vida.
- Albergar frustración: Unido al punto anterior, cuando te comparas con otros, juzgas con superioridad las cosas que ellos poseen, de modo que para ti es de mejor calidad el carro de tu vecino, el maquillaje que usa tu compañera de trabajo; también su vida es más agradable, a diferencia de la tuya, que según tus comparaciones, es un asco. Todo esto te llena de frustración y amargura
- Tener una idea corrupta de ti misma(o): Es como lo que viven las personas anoréxicas: Al compararse con personas "más atractivas" en apariencia, se convencen de cuán gordas están, aunque dicha distorsión sea incierta en absoluto.
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Estas son solo algunas de las lamentables consecuencias que vienen como resultado de compararte con otras personas.
Ahora, considera el daño que esto le causa a tu relación.
- Incapacidad de disfrutar experiencias: Será muy difícil que encuentres placer en las actividades que haces con tu pareja porque estarás pensando en la vida de los demás.
- Insatisfacción con la relación: Para ti, todas las parejas son felices y disfrutan de su relación, excepto tú. Nada te satisface porque consideras que solo lo de los demás tiene valor o es agradable.
- Consigues que tu pareja se sienta mal: Como tu pareja nota que nada te satisface y que no disfrutas de vuestra relación, puede pensar que está haciendo algo mal o que ya no lo quieres y cada vez es más grande su frustración y amargura debido a esto.
Cuando las comparaciones son hacia tu pareja
Tan destructivas como lo son las que están dirigidas a ti misma(o), son las comparaciones que haces de tu pareja. Piensas que a tu pareja le faltan cosas que otros tienen, que carece de habilidades que otros poseen y sientes que es muy poca cosa para ti. Cuando haces esto, pisoteas su valor como persona y desprecias el hecho de haberlo elegido un día para compartir sus vidas juntos. Entonces, te comportas con indiferencia y menosprecio, te aburre estar con el/ella, piensas en cuán maravillosa sería tu vida si estuvieses con alguien diferente o incluso si no tuvieras ninguna relación.
Consejos para evitar las comparaciones
Acepta que nadie puede ser igual a otro
En lugar de compararte con alguien más o de comparar a tu pareja, reconoce que cada ser humano en la ancha faz de la tierra es diferente, único, singular. Cada quien posee rasgos y atributos propios que lo hacen diferente de los demás, y en esa diferencia estriba una enorme riqueza de la que cada quien es dueño.
Aprecia las diferencias
¿Cuál es tu color favorito? o ¿tu comida predilecta? ¿por que son esas tus respuestas y no otras? Pues, eso que hace tan diferente tu comida preferida o tu color para que te guste por encima de todo lo demás, es lo mismo que debería hacerte preferir tu persona por delante de todos demás. No hay razones realmente validas para que tengas envidia de otros, ya que tu eres un mundo completo que cuenta en si mismo con todo lo necesario para la felicidad.
Valora lo que posees, por que nadie más lo tiene
No codicies nada de tu prójimo, por que eso sole te generará sentimientos de frustración e insatisfacción. Más bien, sientete agradecido por cada uno de los tesoros que solo tu posees: alimento diario, vestimenta, un hogar acogedor, salud, capacidades y talentos únicos, y en especial, valora a la persona que tienes a tu lado por que no por causalidad la elegiste como tu pareja.
Trabaja en fortalecer tu autoestima
Así, podrás disfrutar con mayor intensidad todo lo que tienes y lo que puedes vivir. Te sentirás a gusto contigo mismo y estarás en condición de transmitir eso mismo en tu relación.
Y tú, ¿alguna vez te comparaste con alguien? ¿has querido alguna vez tener algo que otros poseían? Cuentame en los comentarios.
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